Los aceites esenciales y los bebés

• Como regla general, se aconseja no aplicar aceites esenciales en estado puro sobre la piel de los bebés. Se deberán diluir en un alguna materia grasa, como un aceite vegetal natural, por ejemplo.

• Por definición, las precauciones a tener en cuenta para utilizar aceites esenciales en bebés son las mismas que en niños de edad más avanzada, con las adicionales citadas anteriormente. (+ info: los aceites esenciales y los niños de más de 3 años):

• Antes de utilizar un nuevo aceite esencial o una nueva combinación de aceites esenciales se deben aplicar siempre un par de gotas en la fosa del codo para verificar que el bebé no es alérgico a ningún componente. Habrá que esperar 24 horas para comprobar que no ha habido ninguna reacción alérgica (toda la información sobre la prueba de la alergia está disponible aquí);
• No se debe aplicar nunca un aceite esencial puro directamente sobre los ojos, la nariz o las orejas;
• Se debe evitar toda exposición al sol durante las 12 posteriores a la aplicación de un aceite esencial que presente un riesgo fotosensibilizante;
• Se deben comprobar siempre las guías específicas a cada aceite esencial para respetar los consejos de utilización y dosis.

¿Cómo utilizarlos?

Pueden utilizarse mediante difusión en la habitación, o mezclarse con aceites vegetales y aplicarlos en masaje. Pero debemos tener cuidado y no sobrepasar las dosis ni utilizarlos demasiado a menudo. En caso de duda, se recomienda pedir consejo a un profesional de la salud. Tras haberlo consultado con un médico, es posible utilizar los aceites esenciales a modo de supositorio, siempre y cuando estos sean confeccionados por un farmacéutico.