El aceite vegetal de Nuez de Macadamia se obtiene mediante el prensado de unas nueces de interesantes propiedades originarias de Australia. Sus propiedades son similares a las del aceite vegetal de Almendra Dulce, pero se adaptan más a las necesidades de los adultos. Es rico en ácido palmitoleico, capaz de proteger las células, por lo que será un buen aliado de las pieles más frágiles y estropeadas. Es un excelente vector para que la piel absorba más fácilmente los aceites esenciales, ya que atraviesa la barrera de la dermis sin dejar ningún tipo de película grasa en la superficie. Tanto en invierno como en verano, protege la piel de las agresiones externas y la nutre en profundidad. Nombre en latín: Macadamia integrifolia Maiden & Betche. Parte utilizada: nueces.
Y también algunas propiedades secundarias:
En caso de alergia a los frutos secos, consultar con un médico antes de cualquier utilización.
El aceite vegetal de Nuez de Macadamia es extremadamente rico en moléculas de interesantes propiedades a nivel cutáneo. Los ácidos oleicos y palmitoleico presentes en su composición permiten, hidratar y proteger la piel en profundidad. Además, al aplicarse mediante un masaje, facilita la microcirculación a nivel local y tonifica el sistema linfático, lo que fomenta la regeneración cutánea y es muy útil para tratar los problemas de la piel de las manos, derivados de una mala circulación.
Las propiedades del aceite vegetal de Nuez de Macadamia lo convierten en una base ideal para los aceites de masaje: penetra con mucha facilidad en la piel. También le devolverá a la piel toda la elasticidad perdida y combatirá la aparición de estrías. Es preferible utilizarlo a modo de prevención.
El aceite de Nuez de Macadamia es un aliado de excepción para el pelo: si se aplica a modo de mascarilla protegerá el pelo de las agresiones externas. Además, también se utiliza mucho para mantener el tiñe en el pelo. El aceite de Nuez de Macadamia crea una película protectora en el pelo, volviéndolo más resistente a las diferentes agresiones a las que se enfrenta en nuestro día a día (sol, viento, arena, coloraciones...). Además, al contener ácido oleico y palmitoleico, es capaz de hidratar el pelo y el cuero cabelludo en profundidad. Por último, al estimular la circulación sanguínea y linfática, favorecerá la microcirculación local capilar.
El aceite vegetal de Nuez de Macadamia es extremadamente nutritivo y, además, no dejará ningún tipo de película grasa, ya que se aclara muy bien. Por último, es capaz de proteger las fibras capilares de las agresiones externas, para que estas no se estropeen más.
El aceite de Macadamia es uno de los pocos aceites vegetales que se adaptan a pieles de todo tipo, y gracias a sus propiedades hidratantes y suavizantes dejará la piel como nueva. Se compara a menudo con el aceite vegetal de Almendra Dulce, que se utiliza más en bebés. El aceite de Nuez de Macadamia tiene propiedades similares pero se adapta mejora a las pieles más maduras. Gracias a su elevada concentración en ácido oleico, la Nuez de Macadamia reforzará la barrera hidrolipídica, lo que permitirá conservar la hidratación de la piel, además de su elasticidad y de hacer que esté mejor protegida.
Gracias a su riqueza en ácido palmitoleico, presente de manera natural en el sebo producido por nuestro organismo, el aceite vegetal de Nuez de Macadamia regula la producción de sebo para que esta no sea excesiva y desempeña una función antibacteriana, algo muy útil para las pieles que tienden a verse afectadas por el acné.
El delicioso aroma a nuez de este aceite vegetal hará las delicias de más de uno. Este aceite es rico en ácidos grasos insaturados, sobre todo en ácido oleico y palmitoleico, por lo que, además de aportar un toque de sabor, también presenta beneficios para nuestra salud. Gracias a su acción tonificante a nivel sanguíneo y linfático, ayuda a prevenir la diabetes de tipo 2 y diferentes problemas cardiovasculares. Al ser muy estable, puede consumirse tanto crudo como cocinado. En definitiva, todos son puntos a favor de utilizar al aceite de Nuez de Macadamia en nuestros platos, tanto a nivel gustativo como nutritivo.
El sabor del aceite de Nuez de Macadamia es muy interesante y puede dar un toque de originalidad a los platos a los que les falta algo diferente.
Por sorprendente que parezca, se están realizando estudios para poder utilizar el aceite de Nuez de Macadamia como biodiésel. Vale que no tiene nada que ver ni con la aromaterapia ni con la cosmética casera, pero en un contexto social donde la contaminación está demasiado presente, cualquier alternativa de transporte natural, duradera y responsable con el medioambiente es interesante.
Para fabricar este biodiésel, el aceite vegetal bruto debe sufrir una transesterificación con metóxido de potasio durante una hora a 60 °C. Estos estudios han podido demostrar que al utilizar este biodiésel, se puede observar una reducción significativa de las emisiones de monóxido de carbono y de partículas finas.
A pesar de estas prometedoras conclusiones, deben realizarse estudios más detallados sobre el rendimiento mecánico, la combustión y el desgaste de ese biodiésel antes de que pueda comercializarse. ¡Puede que de aquí unos años las nubes de contaminación dejen paso a un agradable aroma a nueces!