Fresas silvestres desecadas: usos y beneficios nutricionales

La fresa es una planta rastrera de la familia de las rosáceas. Planta muy popular en el mundo, se cultiva por su fruto: la fresa. Del género Fragaria, este término procede del latín "fragare" que significa exhalar un olor y que dio origen al verbo "oler". El género nos dice que las fresas son fragantes y llenan los puestos de fruta a principios de verano. Según la tabla Ciqual, las fresas son la fruta con menos calorías, después de los limones. Desde el punto de vista nutricional, las fresas entran en la categoría de "frutas ácidas" por su bajo contenido en azúcares. Sin embargo, tienen un auténtico sabor dulce. Verdadera fruta de verano, las fresas son muy populares y pueden consumirse frescas, en repostería, en mermelada, confitadas, secas, etc. Las fresas lo tienen todo para gustar, razón de más para disfrutar de las fresas deshidratadas durante todo el año. Las fresas deshidratadas concentran el sabor y los nutrientes de la fruta. Ricas en fibra, combaten la hipercolesterolemia y el estreñimiento. Nombre latino: Fragaria vesca L. Familia botánica: Rosaceae. Parte utilizada: Fruto.

Consumo recomendado

La fresa deshidratada es una fruta seca. Por lo tanto contiene más azúcar que una fresa fresca, las recomendaciones de consumo diario están definidas. En cura clásica o por placer, una ración de Fresa desecada se estima entre 20 y 30 g al día, lo que representa de 4 a 5 cucharaditas de Fresa desecada al día.

¿De qué forma?

Para aprovechar al máximo sus ventajas, puedes utilizarlas:

  • Todo
  • En piezas
¿A qué hora del día?

Le aconsejamos que los utilice durante la(s) siguiente(s) comida(s) para aprovechar al máximo sus beneficios:

  • Desayuno
  • Almuerzo
  • Aperitivos
  • Cena
¿Qué modos de uso?

Puedes incorporarlos a las siguientes preparaciones para que sean más fáciles de tomar:

  • Ensalada
  • Postre
  • Yogur, productos lácteos
  • Plato
  • Sólo
  • Mezclado con otros frutos secos
  • Infusión
  • Muesli

Salud Nutrición Beneficios

25 g de fresas deshidratadas contienen una porción significativa de la Referencia Poblacional de Nutrientes (PNR) para la fibra.

Como tal, las Fresas Deshidratadas pueden complementar su dieta sana y variada.

Aparato digestivo

Las fibras modulan el tránsito intestinal. Las fresas secas aportan fibra soluble a través de su pulpa y fibra insoluble a través de sus aquenios (las semillas visibles en la superficie de las fresas). Juntas tienden a acelerar el tránsito, reduciendo el riesgo de estreñimiento (consulte nuestra guía estreñimiento y dieta).

Metabolismo

Un exceso de ácidos grasos saturados eleva los niveles de colesterol. Las fresas secas son naturalmente bajas en ácidos grasos saturados, por lo que no contribuyen al aumento del colesterol en la sangre. Además, son ricas en fibra, por lo que ayudarán a reducir la absorción de colesterol.

Sistema cardíaco

Las fresas secas son bajas en sodio. En exceso, el sodio favorece la subida de la tensión arterial, lo que aumenta inevitablemente el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Por lo tanto, las fresas deshidratadas previenen estos riesgos.

Propiedades nutricionales

Propiedades principales

  • Laxante (fibra): las fresas secas son ricas en fibra. Estas últimas aumentan la masa de las heces y favorecen la producción de gases. El conjunto acelera el tránsito intestinal.
  • Tónico (hidratos de carbono, fibra): las Fresas secas son ricas en hidratos de carbono simples. Fácilmente asimilables y utilizables por el organismo, devuelven la energía al cuerpo. El alto contenido en fibra de las fresas deshidratadas también ayuda a aumentar gradualmente los niveles de azúcar en sangre, lo que limita el almacenamiento de azúcar al tiempo que proporciona una sensación de saciedad.

Propiedades secundarias

  • Protector cardiovascular (sodio, ácido graso saturado, fibra): ricas en fibra, pobres en ácidos grasos saturados, las Fresas secas protegen el sistema cardiovascular de las patologías ligadas al aumento de los niveles de colesterol. En efecto, las fibras reducen la absorción del colesterol presente en los alimentos. Además, su bajo contenido en sodio no contribuye a la ingesta de sodio que tiende a aumentar la tensión arterial y a sobrecargar el corazón.

Valores nutricionales

*Cantidad diaria recomendada

Más información sobre la planta : La planta de la fresa

La fresa pertenece a la familia de las rosáceas. Las plantas de fresa son hermafroditas y no alcanzan más de 20 cm de altura. Por ello utiliza un método de propagación por estolón, un órgano en forma de tallo aéreo sin hojas, que se une al suelo para formar un clon de la planta madre. En un entorno favorable, suelo ácido, en una zona templada, las plantas de fresa se propagan fácilmente. Existen numerosas variedades de plantas de fresa repartidas por todo el mundo, todas ellas cultivadas por su fruto: la fresa. La fresa preferida de los franceses parece ser la variedad Ciflorette, endémica de la llegada del verano. Existen dos tipos principales de plantas de fresa: las silvestres, que ofrecen fresas más pequeñas y perfumadas, y las cultivadas. Hoy en día, la fresa es muy popular, pero no siempre fue así. En la Edad Media, se la tenía en poca estima porque crecía muy cerca del suelo. La fresa era, por tanto, "inadecuada" para la nobleza de la época, que prefería la fruta que crecía en altura. Con el paso del tiempo, las actitudes y el estatus cambiaron y se convirtió en la baya más popular.

La fresa, una fruta compleja

En la familia de las falsas frutas, ¡pedimos la fresa! Desde el punto de vista botánico, el fruto rojo que comemos en verano es la hinchazón del receptáculo floral fecundado. Los frutos son los aquenios: las "semillitas" de la superficie. Así, lo que consideramos un fruto es en realidad una multitud de frutos unidos a un ginóforo (prolongación del pedúnculo) alargado. He aquí un tema que le permitirá "devolverse la fresa" al final de la comida.

Fresas silvestres ecológicas...

16 notas

Ver el producto